"Cococho y la Oveja" Obra breve de peluche.

“Cococho y la Oveja” Obra breve de peluche.




Personajes: Cococho


Chunchuna


Oveja de peluche.



Un hombre esta sentado en el borde de una cama, cabizbajo, los dedos entrelazados juegan nerviosamente con una media de mujer. A su lado junto a la cama una oveja de peluche. El se para bruscamente y camina hacia la derecha sin dejar de hacer ademanes y gestos ansiosos. Se frena repentinamente y se encamina hacia la oveja decidido. Se sienta en la cama y le habla.



Cococho: - Si, claro, ahora quieres irte Chunchuna. Justo ahora cuando yo, yo, estoy poniendo todo de mí para que nuestra pareja no naufrague… Justo ahora cuando se ve una luz, un aire fresco para los dos. (La mira fijamente y acercando su cara lo mas posible a ella) Ahora que viene el invierno, ahora que el precio del maíz pishingallo ha bajado, ahora que había conseguido para ti un peluquero tan barato y tan homosexual. ¡No! (solloza)¡Que me cosa la boca cupido si te miento: Todo entre nosotros esta cambiando. Yo estoy cambiando, no más desprecio, no mas engaños! (se incorpora moqueando, mirando al suelo camina de un lado al otro. Situado en el punto más lejano a ella le habla) ¡No te vayas amor mío!



Pausa larga, Cococho camina tristemente hacia ella.



Cococho: - ¿Chunchuna? ¿No me hablas? ¡Háblame mujer!(pausa) Ya se lo que quisieras decirme (afinando la voz) : “Las cosas cambian un poco para poder seguir estando como están” ja, que filosofía tan barata. ¿Cómo se te ocurre pensar eso? ¿Cómo carajo eres tan soberbia como para borrar de un plumazo cualquier esperanza? ¿Chunchuna quién te ha enseñado que...? ¡Deberías dejar de ir a ese psicoanalista, que yo mismo te recomendé! ¡Cuernos..! (solloza amargamente) ¿Sabes qué? Tu te la das de pesimista para parecer “progre”, es eso (solloza arrodillado) Debe ser eso. Pero bueno, que se yo...tu silencio lo dice todo.



Se arrima hasta el pie de la cama y comienza a poner en un bolso su ropa.



Cococho: - Te dicho lo que quería decirte, vos cerraste la boca cobardemente.



Canta: “en esta misma cama


que vio nuestro amor florecer,


ahora recojo mis cosas mujer”



Cococho: (Arrepentido se acerca a la ovejita, la acaricia) Por favor dime que ya no sientes fuego cuando te acarician mis manos, ¡Mira! Te hago pompón-pompón, como te gusta a vos...(juega con las lanitas de la oveja) ¡No me dejes! (aprisiona con los dedos una mata de lana, la mira fijamente a los ojos) se que estas pensando esto: “No seas cruel, Cococho no hagas de mi partida un acto indigno. El que yo me vaya es parte de este cambio que supimos que acontecería cuando decidimos intentar algo para salvar la pareja”. ¡Mierda, Chunchuna como puedes pensar eso!



Él se retira bruscamente, termina de poner sus cosas en un bolso y se va arrastrando exageradamente sus pies. Antes de abrir la puerta de calle, le habla:




Cococho: - La verdad, amor, es que tu necesitas un pastor, y yo jamás dejaré de ser un lobo. Pero...una cosa es lo que tu necesites y otra muy distinta lo que tu corazón elija. Adiós, se va el lobo que tu corazón ha elegido.



Cierra la puerta sollozando, pero vuelve a entrar empujado por Chunchuna, su esposa, que llega de la calle.



Chunchuna: - Espera Cococho, esta vez no te me escapas...estuve toda la mañana esperando que me digas eso que que querías decirme...te escucho.



Cococho: - ¡Chunchuna! Eh! No, nada no tiene importancia.



Chunchuna: - Ah! Noooo, siempre el mismo vos, siempre acobardado a la hora de poner las cartas sobre de la mesa...¡Ándate al diablo! (ella es muy grosera y aumenta la voz con cada palabra que dice)



Cococho: - Pero en verdad...bah...en realidad si tengo algo para decirte...bueno...tal vez...pero...Chunchuna.



Chunchuna: - ¡Deja de dar vueltas cococho y habla!... ¡O me tienes miedo acaso! (continúa gritando)



Cococho: - No, no, así yo no hablo (Se va bruscamente)



Ella camina enojada hasta cerca de la cama, da una patada a la oveja y se sienta en la cama a llorar. Las luces decaen lentamente, un cenital sobre de la mujer es lo último que se apaga.



Telón final.

"El Marido, la esposa, su amante y el zorrino" (p/ mayores 18 años fragmento))

Esta obra surgío como ejercicio de dramaturgia, durante un taller al que asistí. Tiene pinceladas de absurdo y erotismo poético, como muchos de mis textos. Y esta sin estrenar- Es la primera vez que la doy a conocer. Puede ser interesante su puesta o para trabajarla en taller teatral por su brevedad, en fin.. ¡Que la disfruten! y por favor dejen comentarios.


El marido, la esposa, su amante y el zorrino.



Personajes: Rene Ghando el marido.

Liz, la esposa.

Sergio Samuel, el amante.

Todos de edades que rondan la treintena.

Acto 1.

Un dormitorio desordenado, en la cama dos amorosos amantes se acarician y hacen el amor. La puerta del cuarto se abre e ingresa un hombre, tranquilo encendiendo un cigarrillo. Ellos no lo ven. El se para delante de ellos y les saca una foto. El flash de la cámara les hace advertir la presencia del hombre que es el marido de ella.



Rene:- Je, Puta a domicilio..¿Cómo dicen ahora?..ah, delivery, puta delivery, je. Son las peores.



Liz:- ¡Rene!...¿Crees que me importa que me hayas encontrado en la cama con otro?, Míranos, míranos, ahh, ¿Sabes que? he gozado como nunca, ah, este es un verdadero hombre, un potro, Dios lo que me estaba perdiendo por estar con un boludo de la legión del viagra como vos.



Rene:- Je, a callar putita. Ah , pero si es Sergio Samuel, el pescador de sábalos, ah veo que a mi mujer finalmente le clavaste el anzuelo, la ensartaste en tu lanza, la metiste en el sichanfle (acompaña esto con gestos obscenos), ahhh. Pero chango has hecho una gran boludez te has metido con la mujer de Rene Ghando, y eso mi honor no me deja perdonarlo.



Liz:- Hijo de puta hace tres días que saliste diciendo que ibas a comprar cigarrillos..que te fuiste hasta la fabrica de ..para que lo leo(se acerca y toma de la mesa de luz el paquete de lemans y lee) Massalin Particulares, Av. L. N. Alem 466. p, de Bs. As.



Rene: - Me humillare dándote una explicación solo por el simple hecho de dejarte mal parada Liz Mariel de Ghando, sabes que a un hombre nunca le faltan asuntos para atender, dinámica social que le llaman, interacción saludable de personas ocupadas: salí y un joven de unos 20 años me corto el paso y luego de preguntar mi nombre me confeso que yo era su padre..y si, los datos que me dio me lo confirmaron, luego fuimos hasta el registro civil y le puse el apellido Ghando, si, mi apellido, el bronce de mi prosapia, coronó finalmente su vida chata de muchacho de esta porquería de ciudad. Y una cosa llevo a la otra, fui a visitar a su madre, Luisa, y la vi y me volvió el amor, por supuesto ella no me había olvidado, je.



Liz:- No puedo creer que me haya casado con esta patética cosa como ser humano que parlotea tantas malditas cosas en mi narices. Tene dignidad y acepta que mas allá de todo sos un Carnero..Y para mas datos: fuiste un carnero..y si tienes la amabilidad de dejar este cuarto lo seguirás siendo en el día de la fecha... me cortaste un orgasmo espectacular... ya venía, era dulce... me parece que iba a ser lo mas parecido al vuelo de un pájaro, y yo que siempre he soñado con volar.



Sergio Samuel: -Disculpen, pero yo me retiro...y yo no sabia que ella era casada...bahh pensé que estaban separados ustedes. Lo siento don Rene, perdóneme.



Rene: -Espera che, como te vas a perder lo mejor..



Sergio Samuel: -¿Y que es lo mejor?..no veo que esto se vaya a poner mejor.



Rene: -Lo mejor es que voy a meterles dos balas en el corazón a cada uno. (Saca un revolver de entre sus ropas y comienza probar si esta cargado) No, mejor cuatro en nombre de cada uno de los hijos que tuve con esta puta....( continúa)

"Ovulation" (fragmento)

Ovulation




Personajes: El.

                   Ella.



Un parque público. Nadie en escena. De repente por derecha aparece un hombre caminando y con su bicicleta al lado y por izquierda una mujer con su bicicleta también junto a ella. Caminan algo cansados, algo tristes, él la mira cuando están a una distancia de más o menos cinco metros. Mantiene la mirada fija en ella, que cuando pasa a su lado lo mira con el rabillo del ojo por un segundo. Luego, apenas se han alejado un poco, la bicicleta de él “cobra vida”, él es impulsado por el vehículo que se lanza tal como un perro a husmear la bicicleta de ella. Se produce una situación en la que la bicicleta de él intenta “montar” a la bicicleta de ella, él la sujeta. Se oyen “ no che” “deja de hacer eso” etc.



El: - Eh! Disculpe...¡Quieta! (a la bici) je,je, creo que su bicicleta esta en celo. Disculpe, debe ser la primavera.



Ella: -Hmmm, creo que usted se equivoca, por favor déjennos...digo déjeme tranquila.



El: - Yo no quiero molestarla, mi vehículo es el que, esteeee ...es la naturaleza ciclística...no me juzgue mal.



Ella: -Por favor deje de ...(él la interrumpe)



El: - Dejémoslas solas un rato, así, así, recostadas...y verá como..(Él toma ambas bicis y las une dejándolas tiradas en el piso) (continúa...)